jueves, 26 de septiembre de 2013

Resistencia a la insulina
Estar alerta a los síntomas es escencial, ya que se trata de una enfermedad  tratable y completamente reversible. El consejo es realizarse el examen de curva de insulina para detectar y tratar la condición tempranamente.
En Chile, cerca de 250 mil parejas anhelan tener un hijo, pero no lo consiguen por problemas de infertilidad, lo que representa un 14% del total de parejas en edad reproductiva.
Así lo destacan cifras otorgadas por el Gobierno quienes en base a esta problemática impulsaron un completo programa de fertilidad para ayudar a estas parejas a cumplir su sueño. 
Entre las causas más comunes que  provocan infertilidad femenina se encuentran enfermedades como la endometriosis, la ausencia de ovulación y obstrucción de trompas de Falopio. Otra de las que se considera de mayor crecimiento es la infertilidad producto de la resistencia a la insulina.
“La insulino resistencia es un estado pre-diabético que repercute en todo el metabolismo de la mujer y también altera su fertilidad, disminuyendo la calidad del óvulo y las ovulaciones (ovulando a  veces 1 ó 2 veces al año), haciendo que sea más difícil para una mujer conseguir embarazo y cuando ésta lo consigue también aumenta, un poco, el riesgo de aborto”, explica el ginecólogo y experto en fertilidad, Felipe Muñoz.
A pesar de que el padecimiento va en alza, ya que la resistencia a la insulina afecta casi al 40% de la población femenina, es también una de las de más fácil solución.
El especialista recomienda que para revertir la resistencia, es imprescindible llevar una vida sana. “Es necesario una  alimentación equilibrada: disminuir el consumo de grasas saturadas, habitualmente de origen animal, por grasas insaturadas vegetales, no saltarse las comidas sobre todo el desayuno, es la primera comida del día”.
También es necesario acompañar la comida saludable con actividad física regular.
“Y aquí no es necesario ir al gimnasio, sino que disminuir el sedentarismo, caminar más, bailar, andar en bicicleta. Hacer actividades qua antiguamente se hacían en forma muy habitual y que actualmente con la televisión y la comida envasada cada vez se hace menos”, recomienda.
Finalmente, explica el profesional, para ayudar el proceso existen fármacos en donde “Metformina”, es la estrella, sin embargo sin lo anterior, este medicamento  no surte ningún efecto.
“Si no resulta esto la cirugía bariátrica específica para esta condición, que la llamamos cirugía metabólica, es la ultima oportunidad para estos pacientes. Pero no es la panacea, si no hay cambios en hábitos de vida al cabo de cinco o 10 años se regresa a lo mismo”, señala. 

-¿Cómo se puede detectar de forma temprana?
-Toda mujer que sube de peso en forma brusca, o que siente crisis o ataques de ansiedad por comer, en forma compulsiva, principalmente cosas dulces  o también se debe poner cuidado en aquella mujeres que pese a cuidar  la alimentación no logra controlar su peso. Se puede sospechar cuando tienen una medida de cintura que mide más de 88 cms.  (lo ideal es que sea menor de 81 cms), o si la relación cintura /cadera es mayor 0.8 para las mujeres, lo que indica que tiene mucha grasa abdominal, que es la responsable de la resistencia a la insulina.
También lo podemos sospechar en niñas en quienes la piel se torna más oscura detrás del cuello o la aparición de acrocordones, (lunares de carne) alrededor del cuello también un poco más oscuros.

Síndrome de ovarios poliquísticos
Una de las enfermedades que se asocia habitualmente a la resistencia a la insulina, es el muy común síndrome de ovarios poliquísticos. 
“El síndrome de ovarios de poliquísticos (SD) puede ser primario (una enfermedad del ovario) o secundario (el aumento de la insulina), la que trae como consecuencia que los ovarios se llenen de pequeños quistes, que no es otra cosa que óvulos (folículos) que no pueden salir del ovario. Es por eso que hay mujeres con SD con y sin insulinoresistencia. Habitualmente la asociada a insulinoresistencia representa más del 70% de todos los síndrome de ovarios poliquísticos, que vemos en Chile”, indica.
En estas pacientes el tratar la resistencia a la insulina hace que los ovarios funcionen y los quistes  desaparezcan, recuperando de esta forma muchas veces la fertilidad.

lunes, 23 de septiembre de 2013


8 factores que contribuyen a la infertilidad


Este artículo fue publicado en: http://www.elnuevodia.com/
Puedes leer su versión original en: http://www.elnuevodia.com/8factoresquecontribuyenalainfertilidad-1602852.html
 

La OMS estima que hay 50 millones de parejas con problemas de infertilidad en el mundo
Por Karen Johana Sánchez / El Tiempo / GDA

La Organización Mundial de la Salud (OMS) estimó en aproximadamente 50 millones el número de parejas infértiles en el mundo, una cifra que no ha disminuido en los últimos 20 años, a pesar de los avances científicos que se han registrado en el tema desde 1990.

Aunque ese año había 42 millones de parejas infértiles y, para el 2010, la cifra aumentó a 48.5 millones, la organización explicó que este aumento en el número absoluto de personas con problemas de fertilidad se generó debido al crecimiento demográfico. Pero enfatizó en que falta investigación adicional, pues en la infertilidad influyen factores infecciosos, ambientales, genéticos e incluso culturales.

En este sentido, cabe resaltar cuáles son esos factores que se encuentran en el medio ambiente y en la sociedad que intervienen para que las parejas no puedan tener hijos.

 1. Aplazar el embarazo
Según el estudio mundial de la OMS, en los países más ricos las mujeres retrasan la búsqueda de su primer hijo, y entre mayor sea la mujer, peor es su calidad ovárica, lo que dificulta concebir. Esta situación se presenta por la prioridad que la mujer le da actualmente a su realización académica, profesional y personal. De acuerdo con la Sociedad Americana de Medicina Reproductiva (ASRM), a los 30 años de edad, una mujer saludable tiene un 20 por ciento de posibilidades de lograr un embarazo en cada ciclo menstrual, mientras que 10 años más tarde, a los 40, esas posibilidades se habrán reducido a menos del 5 por ciento.

 2. Poner límite a la fertilidad
Cuando una mujer tiene 40 años y se confronta con su fertilidad, le da pena exteriorizar el deseo de ser madre y la sociedad se lo confirma, lo que hace que evite el tema. Una encuesta publicada en la revista Human Reproduction, en la que participaron unos 25 mil hombres y 22 mil mujeres de países europeos, indicó que la mujer a los 42 años ya se sentía vieja para tener hijos, mientras los hombres, después de los 47. En Latinoamérica no se tienen esas cifras, dice el ginecobstetra y magíster en reproducción humana Fidel Cano Franco, director médico de InSer Instituto de Fertilidad Humana.

 3. Tabaquismo, alcoholismo y drogadicción
El 13 por ciento de los casos de infertilidad en la mujer se deben al tabaquismo, dice la Sociedad Americana de Medicina Reproductiva (ASRM). El consumo excesivo de estos productos, en ella, afecta la calidad de los óvulos, deteriora la célula como tal. Desde el punto de vista masculino, se afectan la movilidad y la cantidad de los espermatozoides, explica el ginecobstetra Joaquín Humberto Idrobo Piquero, ginecólogo y obstetra de la Universidad del Valle con maestría en reproducción humana en la Universidad de Valencia, España. El cigarrillo y la drogadicción en dosis altas, añade Cano, producen hipoxia, alteración en la calidad de los óvulos, en la implantación del embrión y aumenta la incidencia de abortos.  Por eso es importante evitar el consumo excesivo de cigarrillo, bebidas alcohólicas y drogas.

4. Alteraciones nutricionales
Por mantener una imagen corporal estética, la mujer se somete a regímenes nutricionales muy estrictos o, por el contrario, las personas cada vez más adquieren hábitos desordenados que causan obesidad. La Sociedad Americana de Medicina Reproductiva (ASRM) indica que el 12 por ciento de todos los casos de infertilidad se deben a que la mujer presenta un peso corporal excesivo o, por el contrario, por debajo de lo considerado saludable. Es importante saber que la malnutrición afecta la ovulación. En el hombre también se ven afectados algunos órganos.

 5. Sexualidad irresponsable
La investigación de la OMS, al respecto, dice que en los países más pobres las enfermedades de transmisión sexual son las principales causantes en la obstrucción de las trompas de Falopio y, por ende, provocadoras de infertilidad. La promiscuidad produce enfermedades de transmisión sexual que generalmente son asintomáticas en la mujer.

6. Rutinas de ejercicios
Cuando se practica un ejercicio de alto rendimiento sin un soporte nutricional adecuado, se produce un desorden metabólico en el cuerpo. Existen dos extremos, dice Fidel Cano: “Cuando la gente no hace ejercicio tiene un desorden multisistémico y no hay opción de limpiar sustancias tóxicas del cuerpo. O cuando se hace bastante ejercicio, sin nutrición adecuada, el organismo entra en estrés porque está gastando lo que no tiene”. Por ejemplo, las deportistas extremas pueden tener trastornos ovulatorios y dificultades para embarazarse, porque se afectan las glándulas endocrinas, que estimulan los ovarios para que se produzca la ovulación y el ciclo menstrual, dice Idrobo.

7. Contaminaciones medioambientales
Existen sustancias o partículas volátiles generadas en fábricas o empresas que pueden afectar la salud de sus trabajadores. Por ejemplo, sustancias liberadas en fábricas de pinturas, o aquellas que trabajan con arsénico o plomo. Incluso, los agrónomos que se ven expuestos a la propagación de plaguicidas y fungicidas. Estos elementos afectan la calidad de los gametos, tanto masculinos como femeninos.

8. Altas temperaturas en el área testicular
El uso de ropa interior muy ajustada (junto con la ropa externa), exponerse a altas temperaturas de manera continua en lugares como saunas o jacuzzis, o trabajar en panaderías, manejar en carretera por mucho tiempo, entre otros,  afectan la calidad, la movilidad y la morfología espermática. Los testículos deben estar, más o menos, dos grados centígrados por debajo de la temperatura normal del cuerpo. Por eso, la recomendación es usar ropa interior cómoda y ventilada y no exponerse a altas temperaturas de manera voluntaria.

Desvirtuando mitos
El estrés no causa infertilidad. El mal manejo sí. Es simplemente un coadyuvante. La infertilidad no es heredable. La paciente que tiene endometriosis no es estéril, aunque bien es cierto que tiene más riesgo de no quedar en embarazo. No hay alimentos ni sustancias que incrementen la fertilidad.

jueves, 19 de septiembre de 2013

Red Crea, ayudando a lograr el milagro de la vida.
Por: Angie García



Este artículo fue publicado en: http://www.lomasrecomendable.com

En México dos de cada diez parejas padecen infertilidad, padecimiento que se identifica como un problema de salud pública a nivel mundial. No obstante, los avances en el campo de la medicina reproductiva permiten ofrecer diversos tratamientos para resolver el problema y que miles de parejas logren su sueño de ser padres.

“En medio de la vasta información que existe y los avances tecnológicos, las parejas se enfrentan a diversos mitos que envuelven a la reproducción asistida, por lo que la toma de decisión para someterse a un tratamiento adecuado resulta más difícil, redundando en pérdida de tiempo y recursos”, señala el Doctor Carlos Guillermo Maquita Nakano, Médico especialista en Ginecología y Obstetricia y Biólogo de la Reproducción, y fundador de Red Crea, Medicina
Reproductiva.

Para iniciar la desmitificación de la reproducción asistida, es importante conocer su definición:  es el conjunto de procedimientos clínicos y de laboratorio que buscan la fertilización cuando por los medios naturales no se ha logrado. “Es decir, facilitar el trabajo del óvulo y el espermatozoide para lograr la fecundación”, indica el Doctor Maquita.

Los procedimientos básicos son las prácticas de inseminación, mientras que los más complejos son la fertilización in vitro (FIV), inyección intracitoplasmática del espermatozoide al óvulo (ICSI), la criopreservación y la vitrificación. Se sabe si una pareja es candidata a cualquiera de éstas técnicas después de un protocolo de estudios realizados por especialistas.
Entre el 70 y el 80% de las parejas que padecen infertilidad no necesitan reproducción asistida, ya que el padecimiento de origen puede corregirse mediante un tratamiento hormonal o cirugía reproductiva.

Un mito que todavía causa temor entre las parejas es que la reproducción asistida consiste en experimentos que pueden no resultar efectivos.  La realidad es que en el mundo la tasa de embarazo con reproducción asistida alcanza casi el cincuenta por ciento y México no es la excepción.  Con procedimientos realizados en clínicas profesionales con la atención de especialistas, se logran resultados positivos en buena parte de los casos, con mayor éxito en las parejas que reciben pronta atención mediante un diagnóstico y tratamiento adecuados.

Por otro lado, frecuentemente se habla de las consecuencias que pudieran surgir después de recurrir a las técnicas de reproducción asistida. Entre ellas, el cáncer de mama, endometriosis, cáncer ovárico o que se adelante la menopausia.

La realidad es que a más de 30 años de haber nacido el primer bebé por reproducción asistida, se han practicado más de un millón de procedimientos y no se ha demostrado científicamente que los métodos de reproducción asistida ocasionen cáncer en la mujer a largo plazo, ni que comprometan el pronóstico de vida. El cáncer de endometrio y de mama están relacionados con la infertilidad, por el hecho de no existir la procreación, no así los tratamientos de reproducción asistida.

Otra realidad es que las mujeres buscan el embarazo a edades mayores, porque dan prioridad al desarrollo profesional, económico o personal y deciden procrear entre los 30 y los 35 años.  Biológicamente, una mujer a partir de los 30 años tiene cada vez menor posibilidad de lograr un embarazo inmediato. Además de que ciertos factores tales como el tabaquismo, alcoholismo, estrés y obesidad hacen más difícil la concepción.

Otra realidad es que actualmente, los jóvenes inician su actividad sexual a edades más tempranas, lo que se relaciona con falta de pareja estable y el fomento al contagio de enfermedades de transmisión sexual.  Al momento de buscar el embarazo, frecuentemente se encuentra que las infecciones han dañado los genitales y órganos reproductivos, lo que pueden causar infertilidad tanto en la mujer como en el hombre.

Sin importar la cantidad de información que existe en torno a la infertilidad y la reproducción asistida, es de vital importancia que las parejas que sospechen algún problema, se atiendan cuanto antes con un especialista en medicina reproductiva, que permita realizar un buen diagnóstico e indicar el tratamiento más adecuado para cada caso.

Red Crea
Es la primera red de medicina reproductiva del país. Es una institución integrada por una verdadera red de profesionales reconocidos, que ofrece servicios de cirugía reproductiva y reproducción asistida de manera personalizada, de alta calidad y económicamente accesibles, brindando un
servicio integral, de tal forma que los pacientes pueden recibir sus tratamientos de reproducción a través de su médico de confianza o de los médicos afiliados a RedCrea..

Está integrada por un equipo de médicos especializados en Gineco-Obstetricia, Biología de la Reproducción, Embriólogos, Perinatólogos, Anestesiólogos y personal de enfermería capacitado en la atención de sus pacientes.

Todos los procesos de RedCrea están certificados bajo los estándares internacionales de calidad de ISO 9001:2000 y acreditados por la REDLARA (Red Latinoamericana de Reproducción Asistida) lo que permite ratificar la calidad de los servicios, aunado a ello, cuentan con la infraestructura necesaria para la realización de tratamientos de baja y alta complejidad dando como resultado excelentes tasas de efectividad.

A continuación te presentamos al Equipo de Profesionales que integra RedCrea

Dr. Carlos Guillermo Maquita Nakano
Director General RedCrea
Egresado de la Escuela Superior de Medicina del Instituto Politécnico Nacional, y con la especialidad de Ginecología y Obstetricia por parte de la Universidad Nacional Autónoma de México, y con la Especialidad de Biología de la Reproducción certificada por el Consejo Mexicano de Ginecología y Obstetricia. El Dr. Carlos Maquita cuenta con más de 15 años de experiencia dedicados a atender los problemas comunes de la salud femenina y de las parejas con problemas de fertilidad. Actualmente, el Dr. Maquita es profesor del Consejo Mexicano de Ginecología y Obstetricia. Además, es miembro activo de prestigiadas sociedades médicas en México, Latinoamérica, Estados Unidos de Norteamérica y Europa como: la Asociación Mexicana de Ginecología y Obstetricia, la Asociación Mexicana de Medicina de la Reproducción, la Red Latinoamericana de Reproducción Asistida, la Sociedad Americana de Medicina Reproductiva (American Society of Reproductive Medicine), la Sociedad de Cirujanos de Reproducción (The Society of Reproductive Surgeons) y el Colegio Americano de Obstetras y Ginecólogos (American College of Obstetricians and Gynecologists), la Sociedad Europea de Reproducción Humana (European Society of Human Reproduction and Embriology). Gracias a su interés por la Medicina Reproductiva y su preocupación por ejercer una medicina moderna y acorde a los tiempos que vivimos, surge RedCrea, la primera Red de Medicina Reproductiva en México, donde un grupo de especialistas, encabezados por el Dr. Maquita, capitalizan su experiencia y conocimiento para brindar atención personalizada a sus pacientes y apoyo en todo el proceso por lograr la concepción

Dra. Ma. de Lourdes Flores I.
Especialista en Ginecología y Obstetricia con Especialidad en Biología de la Reproducción Humana.
Egresada de la Universidad Nacional Autónoma de México como Médico Cirujano, con especialidad en Ginecología y Obstetricia por el Instituto Nacional de Perinatología Isidro Espinosa de los Reyes. Obtuvo la Especialidad en Biología de la Reproducción por el Instituto Nacional de Perinatología Isidro Espinosa de los Reyes.

Q.B.P. Minerva Alvarado E.
Embrióloga
Titulada como Químico Bacteriólogo Parasitólogo por la Escuela Nacional de Ciencias Biológicas del Instituto Politécnico Nacional.

Bióloga Georgina Ávalos Durán
Jefa de Laboratorio de In Vitro.
Egresada de la carrera de Biología en la UAM Xochimilco. La bióloga Georgina Ávalos se ha desempeñado como Jefa de Laboratorio de Reproducción Asistida en varios centros de reproducción asistida de alto prestigio en los  estados de Yucatán y Guanajuato.
Georgina ha participado en varias publicaciones científicas en temas de reproducción asistida.
Actualmente la Bióloga Ávalos se desempeña como Jefa de Laboratorio de In Vitro en Red Crea además de ser miembro de la Asociación Mexicana de Medicina de la Reproducción.

Para mayor información visita www.redcrea.com.mx



miércoles, 18 de septiembre de 2013

Infertilidad depende de muchos factores
Este artículo fue publicado en: http://www.sumedico.com
Puedes leer su versión original en: http://www.sumedico.com/nota15570.html



Entre el 25 y el 30% de los casos de infertilidad dependen de un factor masculino, como baja producción de espermatozoides, dijo especialista

Son tres las principales causas por las que una pareja no puede tener hijos: ovulación inadecuada, obstrucción de las trompas de la matriz, o problemas de factor masculino por una mala producción espermática, dijo en SUMEDICO Radio el doctor Carlos Maquita Nakano, especialista en Ginecología y Obstetricia.

“Es importante que una pareja acuda con el especialista si tiene más de un año intentando embarazarse sin conseguirlo, porque mientras más tiempo pase, el pronóstico de éxito va reduciéndose”, explicó el experto.
Señaló que cuando una pareja acude al consultorio en busca de un tratamiento para embarazarse, se le explica no sólo por qué no pueden tener hijos en ese momento, sino también qué posibilidades tiene, es decir: un diagnóstico y un pronóstico.

“Hay protocolos para investigar los factores, como mala producción de esperma, baja calidad en la ovulación, que las trompas funcionen bien, que no haya infecciones. Actualmente muchas parejas llegan con problemas primarios, pero también llegan con segundas nupcias, alguno de ellos se operó para no tener más hijos, y al casarse de nuevo están buscando bebés, y en estos casos hay un capítulo aparte porque el pronóstico es distinto”, indicó.

Reveló también que en México se calcula que, aproximadamente, las parejas tardan hasta cuatro años en llegar con el especialista, que debe ser un ginecólogo con especialidad en biología de la reproducción, sin tomar en cuenta que el tiempo es sumamente importante.

Cambios sociales

El médico explicó que factores importantes para la infertilidad son los estilos de vida y algunos cambios sociales, por ejemplo, que las mujeres retrasen el deseo de tener hijos a causa de su desarrollo profesional o personal; también que el inicio de una sexualidad es cada vez más temprano, lo que aumenta el riesgo de adquirir alguna enfermedad de transmisión sexual que puede poner en riesgo la fertilidad, o bien cuando se realiza un legrado descuidado o con gente no especializada; además del consumo de alcohol y otras drogas, así como el sedentarismo y enfermedades como obesidad y diabetes, entre otros.

Señaló que las parejas deben comprender también que el tratamiento es paulatino, se trata de ir escalón por escalón, hasta dar con el adecuado, “pero dura un máximo de cuatro o seis meses, aproximadamente”, indicó el doctor Maquita.

Señaló que con un diagnóstico se evalúa a la pareja y se ofrece un tratamiento inicial, en el que se ataca directamente la causa, cambiando el estilo de vida o mejorando algunas cosas sencillas, si después del tratamiento inicial existe otro factor, se deriva hacia diversos caminos: cirugía reproductiva, reproducción asistida, con técnicas de alta y baja complejidad, como la fertilización in vitro y la inseminación artificial, respectivamente.

También explicó que, afortunadamente, en el 79% de los casos las parejas no requieren tratamientos muy caros para lograr embarazarse, además de que cada vez hay más tratamientos accesibles económicamente hablando.

Periodo ideal

Respecto a la edad, el doctor Maquita señaló que la etapa reproductiva comienza en la adolescencia y termina en la menopausia, y que el periodo ideal para el embarazo de una mujer puede ser desde los 22 hasta los 30 años, ya que después de los 35 años decae la calidad de la ovulación, similar situación que vive el hombre, ya que la calidad de la producción espermática decae, además de que a partir de los 40 años, hay más posibilidades de padecer disfunción eréctil.

Señaló que es muy importante que los especialistas se sinceren con la pareja y comuniquen cuál es el pronóstico real, haciendo hincapié en que después de los 40 años se logran solamente entre el 30 y el 40% de los embarazos.
Indicó que la infertilidad es multifactorial en un 80%, y que aproximadamente entre un 25 y 30% depende del varón.


Finalmente señaló que es importante que cuando una pareja no tiene un estilo de vida sano, y haya tomado la decisión de tener hijos, acuda con un especialista para una consulta preconcepcional, y cambie sus malos hábitos y opte por un estilo de vida saludable.

jueves, 12 de septiembre de 2013


Mioma, el tumor más frecuente

 

Este artículo fue publicado en: http://www.almomento.net
Puedes leer su versión original en: http://www.almomento.net/articulo/144918/Mioma-el-tumor-mas-frecuente

 
Por Lilliam Fondeur
LA AUTORA es ginecóloga. Reside en Santo Domingo.

El útero que no se llena de hijos se llena de miomas, decía un profesor de ginecología.  El mioma uterino es el tumor pélvico benigno más frecuente en la mujer. Las chicas que tienen el privilegio de posponer el embarazo deben asumir la posibilidad de empezar a llenar su útero de miomas.
El mioma se presenta únicamente durante la vida reproductiva. No existe en la pubertad, y regresa con la menopausia,  su presencia depende de la producción de  la hormona llamada estrógeno. La alteración del periodo menstrual es la causa más frecuente de visita al médico. Su presencia puede producir dolor  en el bajo vientre, sensación de compresión, menstruaciones abundantes, dolor en las relaciones sexuales, constipación o estreñimiento, infertilidad y complicaciones en embarazo y parto,

Aunque con la evaluación clínica podemos hacer el diagnóstico, el estudio de sonografía es más fidedigno y revela los miomas difíciles de palpar por su pequeño tamaño o porque la mujer esté en sobrepeso.

La sonografía nos brinda la localización del mioma.  En la mitad de los casos el mioma se encuentra dentro del cuerpo del útero, en segundo lugar pegado a la capa externa o en la cara interna del mismo.  Los miomas pueden ser múltiples y presentarse en diversas caras de la matriz.
Los miomas pueden producir infertilidad si están en la capa interna del útero o si son de gran tamaño.  Cuando la mujer sale embarazada con la presencia de  miomas,  los mismos tienden a disminuir de tamaño o detener su crecimiento.

Los miomas se relacionan a factores hereditarios y raciales. La  incidencia del mioma es hasta nueve veces más frecuente en raza negra. Los miomas son más frecuentes en mujeres mayores de 35 años. Todas las situaciones  en las que  exista un incremento de estrógenos son factores de riesgo y aumentan la incidencia de miomas: nuliparidad, infertilidad, obesidad.

Solo aquellas mujeres que presentan síntomas deben ser tratadas

La extirpación del mioma  es el tratamiento más realizado en aquellas mujeres que no tienen su deseo de maternidad satisfecho, en las que no desean un embarazo la alternativa de tratamiento más aplicada es la histerectomía cuando se presenta la miomatosis uterina, con o sin extirpación de los ovarios.
La histerectomía es una de las cirugías abdominales más frecuentemente realizada en el mundo, en ocasiones sin necesidad.

La embolización de las arterias uterinas ha demostrado su utilidad en miomatosis uterina. Consiste en  introducir sustancias especificas para ocluir las arterias que nutren al útero con el objeto de  detener  el sangrado o el crecimiento de los miomas.

martes, 10 de septiembre de 2013

Un acercamiento sencillo y breve sobre la función de las hormonas en nuestro cuerpo y si son tan malas como parecen
 


Sería raro encontrarnos a una mujer a la que no le han dicho "tienes locas las hormonas". Lo peor es que es cierto. No es que tengamos "locas las hormonas", pero éstas sí nos hacen pasar malos ratos muy a menudo.
Hablamos de ellas y sabemos que son las responsables de que en un momento nos sintamos felices y al otro tristes, sin embargo ¿sabes exactamente cuál es su función en tu cuerpo y cómo saber si realmente hay una deficiencia en su tarea? Para responder algunas de las dudas más comunes sobre el tema, acudimos con el Dr. Sóstenes Mosqueda Covarrubias, Ginecólogo con subespecialidad en Biología de la Reproducción Humana y miembro de la RedCrea de Medicina Reproductiva, quien nos dijo:

¿Qué son las hormonas?

Se trata de sustancias segregadas por las glándulas que, al llegar al torrente sanguíneo, provocan reacciones en las células que forman los órganos y en su funcionamiento, por ejemplo: en el desarrollo, la reproducción, las características sexuales, el uso y almacenamiento de energía, así como en los niveles de líquidos, sal y azúcar en la sangre. Es decir, en pocas palabras influyen en TODO el funcionamiento del cuerpo.

¿Para qué sirven?
Desde el punto de vista reproductivo juegan un papel muy importante, pues son las sustancias que se producen en el ovario, y que desempeñarán funciones en el tejido del útero o en el propio ovario, lo cual tiene incidencia directa en el estado emocional de la mujer. Por ello es que cuando tienen alguna deficiencia, nos desbalanceamos también emocionalmente.

¿Cómo funcionan?

Todas las mujeres tienen ciclos que están regidos por la acción hormonal, cuya concentración es mayor en algunos días. Las hormonas que intervienen son:
  • La folículo estimulante (FSH), encargada de regular el desarrollo y los procesos reproductivos.
  • Los estrógenos, responsables de las características sexuales femeninas tales como desarrollo de las mamas y el ciclo menstrual.
  • La progesterona, que estimula el crecimiento del endometrio, membrana protectora en el útero en donde el óvulo fecundado se implanta y ayuda a la producción de leche.
  • Cortisol, cuya función es hacer que el organismo libere glucosa a la sangre para enviar cantidades masivas de energía a los músculos en situaciones de estrés.
  • Testosterona, que propicia el apetito sexual, la presencia de menos grasa en el organismo e incide en la autoestima.
  • Oxitocina, que tiene relación con la sensibilidad y el ánimo y la tiroidea, que regula el metabolismo y por ende el peso y la talla.

¿Cómo identificar una deficiencia hormonal?
Cuando hay alguna alteración en las glándulas (que se traduce como una mala liberación de estas hormonas) habrá dificultades incluso para la reproducción. Ahora, esta alteración puede ser orgánica: es decir, un daño estructural por una enfermedad infecciosa o por la presencia de un tumor; o -como en la mayoría de los casos- por una alteración funcional: en las cuales no hay una enfermedad como tal, pero sí hay algo que no está funcionando adecuadamente.

¿Se puede prevenir?
Las hormones se alteran debido a muchos factores como cambios súbitos de peso, cambios de alimentación y estilo de vida en general. Los síntomas más comunes para detectar que algo no anda bien son los cambios de peso, de humor, alteraciones en el ciclo menstrual, etc. No obstante, un diagnóstico certero únicamente lo puede hacer un especialista que, si considera pertinente, mandará a realizar un perfil hormonal para verificar que todo esté en orden.

¿Te han mandado a hacer alguna vez un perfil hormonal?

lunes, 9 de septiembre de 2013


Personalidad del hombre influye en su deseo de paternidad


Este artículo fue publicado en: http://www.nacion.com
Puedes ver su versión original en: http://www.nacion.com/vivir/psicologia/Personalidad-hombre-influye-fertilidad_0_1364863654.html

Carolina Ruiz Vega

Estudio investigó la relación entre la personalidad y la fertilidad de 7,017 hombres y mujeres nacidos en Noruega entre 1927 y 1968

Los hombres que son extrovertidos tienden a tener más hijos, asegura un estudio difundido en el International Institute for Applied Systems Analysis (Iiasa).

Luego de analizar la relación entre la personalidad y la fertilidad de 7.017 hombres y mujeres nacidos en Noruega entre 1927 y 1968, los investigadores encontraron que esta influye de forma distinta entre ambos sexos.

Los hombres temperamentales y emocionales tienden a tener menos hijos pero esto solo aplica para los nacidos después de 1957, afirman los investigadores.

Vegard Skirbekk, quien dirigió el estudio, considera que los cambios podrían ser producto de las nuevas “normas sociales” para tener hijos, como por ejemplo, que las parejas de hoy suelen esperar más tiempo para procrear, y que tienden a probar su convivencia antes de comprometerse a criar a los hijos juntos.

“Pueden estar evitando cada vez más el compromiso a largo plazo de tener hijos”, dicen los investigadores, quienes consideran que en los países más ricos la paternidad es menos propensa a ser influenciada por las necesidades económicas de la persona y más, por características de su personalidad.

Aunque el estudio sólo considera Noruega, Skirbekk dice que los resultados probablemente se aplican más ampliamente.

En el Iiasa consideran que “el estudio podría tener implicaciones importantes para la dinámica de la población mundial en un momento en que las tasas de fecundidad entre los países desarrollados han caído por debajo de las tasas de reemplazo”.

lunes, 2 de septiembre de 2013


Plaguicidas afectan fertilidad masculina

 



La Jornada/Ariane Díáz

Estudios epidemiológicos y experimentales han demostrado asociaciones cada vez más sólidas de que la exposición a contaminantes como el plomo, plaguicidas e hidrocarburos son factores de riesgo para los varones en edad reproductiva, ya que disminuyen la calidad de semen, provocan problemas de erección y de vasculatura, entre otros padecimientos, señaló Betzabet Quintanilla Vega, del Centro de Investigación y Estudios Avanzados (Cinvestav) del Instituto Politécnico Nacional (IPN).

Los daños incluso son de tipo genético y hereditario, por lo que los hijos o nietos de individuos expuestos a contaminantes pueden presentar efectos adversos, como tumores en el cerebro, problemas reproductivos o alteraciones cromosómicas como el Síndrome de Turner o Klinefelter. También se ha relacionado con un bajo coeficiente intelectual en niños.

Esto sucede porque las células germinales dañadas llegan a fertilizar al óvulo, pero puede llevar un daño genético a la descendencia.

Las investigaciones que ha realizado en comunidades de Coahuila y Yucatán encontraron que los agricultores presentaban baja calidad de semen en las épocas de mayor aplicación de plaguicidas, aunque este efecto se revierte, pues la calidad de semen se renueva cada 74 días, en el ciclo espermatogénico del humano.

Tema controvertido
La doctora en ciencias destacó que si bien la exposición a contaminantes como metales y plaguicidas y sus efectos en la fertilidad masculina es aún un tema controvertido, la disminución en la calidad de semen en las últimas décadas, demostrada en investigaciones realizadas en diversos países, es un indicador de alerta.

Varios plaguicidas prohibidos o restringidos en otras naciones se siguen usando en México y son muy tóxicos, como el metil-paratión, metamidofos y endosulfan, informó el Cinvestav en un comunicado.

Para contrarrestar o disminuir los efectos de la contaminación, Quintanilla recomendó llevar una dieta rica en cítricos y vitaminas, hacer ejercicio, así como evitar el consumo de alcohol o tabaco.


Infecciones sexuales, un vehículo a la infertilidad

 
Este artículo fue publicado en: http://www2.esmas.com



Las ITS son una de las principales causas que evitan la fecundación

El inicio promedio de la vida sexual es a los 13 años en las mujeres y los 15 años para los hombres, los jóvenes están comenzando muy temprana su actividad sexual  y la gran mayoría no utiliza ningún método de protección contra Infecciones de Transmisión Sexual (ITS).

"El 95% de los adolescentes en el mundo tienen acceso a algún método preventivo, ya sea de anticoncepción o contra ITS, pero sólo un 5% los utiliza", comentó para Esmas Salud el Dr. Carlos Maquita, especialista en medicina reproductiva y director de Red Crea.

Las ITS son uno de los principales factores de infertilidad tanto en hombres como en mujeres. Según estimaciones hechas por la OMS, cada año se producen en el mundo 448 millones de nuevos casos curables y sus complicaciones se encuentran entre las cinco primeras categorías de enfermedades que llevan a buscar asistencia sanitaria y es la causa prevenible más común de infertilidad femenina. 

"Las tres infecciones más frecuentes son gonorrea o infección gonocócica, clamidiasis y microplasma, son las que producen más daño en el aparato reproductor tanto femenino como masculino. Por consecuencia son las que se relacionan más con casos de infertilidad", aseguró el Dr. Carlos Maquita.

¿Cómo dañan?

Las bacterias que se encuentran en las ITS pueden instalarse en el moco que produce el cuello del útero y provocar disminución en la movilidad de los espermatozoides que llegan a través de la relación sexual, o bien,  alterar la permeabilidad y funcionalidad de las trompas de Falopio. En el caso de los varones, los microorganismos se adhieren directamente a los espermatozoides y afectan su calidad y cantidad. 

Cuando  un hombre tiene un caso crónico de clamidia puede presentar inflamación en los testículos y la próstata o trastornos de la uretra, lo que afecta la cantidad y calidad de los espermatozoides: " Recordemos que el semen se compone por esperma y líquido seminal. Una infección, ph inadecuado o característica física anormal en los genitales agrede en vez de proteger los espermatozoides". 

Problema de pareja

"La infertilidad es cosa de dos, no podemos hablar de que es más de la mujer o del hombre. Las infecciones de transmisión sexual pueden ser una causa pero el 80% de los casos son multifactoriales. 

"En las mujeres puede ser que exista una ovulación inadecuada (en este punto influye mucho la obesidad), que haya problemas en las trompas de la matriz o las ITS. En el varón, además de las infecciones, son factores los estilos de vida poco saludables (consumo de alcohol, tabaco y drogas). En ambos casos afecta el sedentarismo y si hay problemas genéticos", aseguró el Dr. Maquita.  

Factores sociales

La postergación de la maternidad y la paternidad son otro elemento importante. Cada vez más mujeres prefieren dedicar mayor tiempo al trabajo y otras actividades, antes de pensar en tener hijos. Sin embargo, la naturaleza no espera y  a partir de los 35 años decae la calidad de óvulos.  

En todos los casos existen métodos clínicos para buscar tener hijos. "La medicina reproductiva puede enfocarse en tratamientos o cirugía. No todos requieren de reproducción asistida. Un alto porcentaje sólo  requiere antibióticos o tratamiento hormonal, tenemos que hacer una evaluación minuciosa porque las técnicas de reproducción asistida siguen siendo tratamientos caros.  

"Existen dos tipos comunes de reproducción asistida: La inseminación artificial  y la fertilización in vitro. Ningún tratamiento garantiza resultados al cien por ciento. A cada paciente se le examina y se le realiza un porcentaje de éxito personalizado, aunque a nivel mundial andamos entre un 60-70% en inseminación artificial y 50% en fertilización in vitro en un solo intento", concluyó el Dr Maquita.